martes, 25 de octubre de 2011

3MSC

De algo estoy seguro.
No podrá quererla como la quería yo, no podrá adorarla de ese modo, no sabrá advertir hasta el menor de sus dulces movimientos, de aquellos gestos imperceptibles de su cara.
Es como si sólo a mí se me hubiera sido concedido la facultad de ver, de conocer el verdadero sabor de sus besos, el color real de sus ojos.Podrá ver lo que yo he visto. Él , incapaz de amarla, incapaz de verla verdaderamente, de entenderla, de respetarla.
Él no se divertirá con esos tiernos caprichos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario